Cuando suena el Mariachi, el mundo canta...

 “El Mariachi suena”

¿Qué nos representa, como mexicanos, mejor que la música de mariachi?

Esa música que se ha llevado hasta los rincones más alejados del globo terráqueo, y que al ser escuchada la trompeta, acompañada del guitarrón, violín y vihuela, cualquier persona dice: ¡México!


Muchas versiones hay acerca del origen de la palabra mariachi, la más conocida es la que dice que en Jalisco, en época de la intervención francesa, un grupo de soldados franceses, llegaron a una fiesta que se celebraba en un pequeño poblado de esa entidad, y al preguntar acerca de el grupo que amenizaba con sus notas la fiesta, les decían:


-“Mira güerito, pos el fandango es porque un par de mensos se desposaron, tonces, aquí les hacemos una fiesta por su boda, el matrimonio pues´n! Y esos son los músicos que les trajimos ¡pa´amenizar el bodorrio!”

-“Oh ¡Marriage!”

-“¡Sí! ¡Mariach!”

¡Vaya lío!


Pero, no hay nada más alejado de la realidad, que esa versión; a pesar de ser la más conocida, es falsa, por

un simple dato:

En 1530 (aproximadamente) Fray Juan de Padilla fue encargado de cristianizar a los nativos del Valle de Coculan, en Jalisco, documentando que fue más fácil su labor musicalizando la historia cristiana, y con esa influencia musical europea, que tenía violines y guitarras, traídos de Europa, los nativos llevaron el

conocimiento musical a sus grupos, los cuales llamaban Mariachi, y que en la lengua Coca (del Valle de Cocula, Jalisco) significa: Canto a María "Maria-ce-son"




Ésta, es también una versión, en la cual yo pienso que es la más acercada a la realidad, pero a final de cuentas, lo que para todos nos significa la palabra Mariachi es: Alegría, Fiesta, Canto, Tristeza, Llanto y todos los sentimientos despiertos al sólo escuchar los primeros acordes de una canción.


Para llegar a esos acordes y sonidos que ahora conocemos ¿Cómo es que se llegó? Lógicamente hubo una evolución, desde que Fray Juan de Padilla introdujo los instrumentos “europeos” a los nativos de la región Coca, y el Mariachi nace de una fusión de caracoles, teponaztlis, huéhuetls, flautas de carrizo con guitarras y violines, un rico mestizaje instrumental. En 1695 los cocas inventaron la vihuela y, más adelante, el guitarrón, sustituyendo el laúd y el contrabajo, instrumentos netamente europeos.


Se sabe que, a finales del siglo XIX, existían, al menos, dos grupos de mariachis en Jalisco, el Mariachi Coculan y el Mariachi Chivatillo, de los cuales salen más grupos de mariachis, entre ellos, los de José García

y el de Cirilo Marmolejo.


La evolución más notoria del mariachi, se dio a partir de la llegada de José García y su mariachi, a la Ciudad de México entre los años 1895-1896, llegando al sur de la Ciudad de México, buscando nuevas plazas para mejorar musical y económicamente, cosa muy difícil de lograr, ya que con el “afrancesamiento” de la sociedad mexicana en aquella época, la música del mariachi, así como el tequila, era considerado del “populacho”, de la plebe, de la clase económica baja.

-“Ay, ayer esos indios pata rajada oían mariachi”


-“Y se emborrachaban con Tequila”


-“! Qué escándalo!”



Aquí es donde el presidente Porfirio Díaz, toma un papel importante en nuestra música, ya que en 1907 celebró dos tremendas fiestas, una por su cumpleaños y la otra en honor del secretario de estado norteamericano, Elihu Root, con ¡música de MARIACHI!


 Después, los grupos de mariachi formarían parte de la Revolución Mexicana, cantando corridos, llevando fiesta a los frentes de batalla, siendo los noticieros de la Revolución.

En los años 30, el Mariachi Coculense de Cirilo Marmolejo, comienza a utilizar el traje de Charro, de Gala,

como vestimenta para el Mariachi, con la diferencia que el Sombrero de Charro es por lo regular: Estilo San Luis

y el usado por el Mariachi es Estilo Cocula ,

cosa que los demás grupos imitaron, ya que le daba mucho lujo a las agrupaciones.



En esa década logra una grabación todavía sin la introducción de la trompeta:

(véase video al final del relato)

El Candidato Presidencial, Lázaro Cárdenas, tiene la gran idea del invitar al Mariachi Vargas de Tecalitlan, fundado en 1898 por Don Gaspar Vargas, a su gira electoral por toda la República. Se tuvo tanto éxito, que
comenzaron a trabajar en programas radiofónicos y aquí, es clave una persona para la evolución del Mariachi: Emilio Azcárraga Milmo, quien hace la recomendación a Don Gaspar y a Don Silvestre Vargas: 

-“Gaspar, Silvestre, ustedes tocan muy bonito, pero, ¿Qué les parece que vamos introduciendo una trompeta al mariachi, para darle otro estilo, algo novedoso, es radio pues”
-“No Emilito, sería afectar la tradición musical, no es buena idea”
-“Tiene razón Gaspar, una trompeta, ¡instrumento del demonio! Se escuchan requete fuerte”
-“Se trata de negocios, y en la radio, pues yo sé un poquito más”
-“Eso sí”
-“Pues probamos, y si no resulta, nos quedamos como estábamos”
-“Juega”



Después de esa imaginaria charla, se logra, y de manera espectacular, el éxito rotundo de la trompeta en el Mariachi, gracias a Don Miguel Martínez, quien fue el primer trompetista del Mariachi Vargas y que todos hemos escuchado en grabaciones de Jorge Negrete, Pedro Infante y todos los cantantes de éxito de aquellos gloriosos años.

Así es como se llegó al sonido y vestimenta actual del Mariachi, claro, ha habido incorporaciones, pero el sonido mariachero, es el que nos regaló en la XEW el Mariachi Vargas, con la incorporación de Don Miguel Martínez.





Así es como llegamos a la actualidad del Mariachi, claro, con evolución en arreglos musicales, vestimenta y más cosas, pero la base de lo actual, es por lo que se llegó desde ese entonces.

Cuando escuchamos: Trompeta, Vihuela, Guitarrón, Violines y Guitarra, sabemos que es nuestra tierra cantando.

Ya lo dijo Vargas: “Cuando suena el Mariachi, el mundo canta”